La teoría de la colisión de un asteroide con la Tierra, la más ampliamente aceptada actualmente, fue propuesta por el físico estadounidense Luis Walter Álvarez y su hijo, el geólogo Walter Álvarez a finales de los años 1970. Esta teoría explica que la gran extinción de finales del período Cretácico comenzó con la caída de un bólido a la Tierra. La mayor parte de las pruebas actuales parecen confirmar en efecto que un asteroide de 10 kilómetros de diámetro impactó en los alrededores de la península de Yucatán, creando el cráter de Chicxulub de 170 kilómetros de diámetro y provocando una cadena de extinciones en masa. También hay que destacar que los científicos no están todavía seguros de si las poblaciones de dinosaurios prosperaban o disminuían inmediatamente antes del acontecimiento del cataclismo. Otra hipotesis afirma que estos seres desaparecieron debido a una serie de cambios climáticos a los que no pudieron hacer frente.
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